Trabajos Realizados

El pulimento consiste en rebajar el suelo o superficie con una maquinaria especifica para pulir, cuyo objetivo es nivelar suelos, eliminar imperfecciones como rayados o roturas, finalizando con acabado abrillantado en la superficie tratada.

En general, todos tipo de suelos y superficies se pueden pulir. De cualquier forma, suele hacerse con mayor frecuencia en suelos de mármol y parquet, ya que son los más se arañan y pierden brillo con mayor facilidad.

En general, el cristalizado de suelos es un tipo de pulimento bastante sencillo, el cual consiste en aplicar un líquido cristalizable sobre la superficie trabajada, que luego debe ser pulida utilizando una lana de acero. De esta manera, se consigue obtener una capa transparente, brillante y duradera.

Lo que lo diferencia del resto de materiales es fundamentalmente el grosor. En este caso se trata de una solera de hormigón con un espesor mínimo de unos 8 cm, a la cual se le da un tratamiento superficial de pulido para conseguir un brillo y una planimetría perfectas.

Puede tener una primera toma de contacto con nosotros a través del formulario, email o teléfono, en la cual le realizaremos un presupuesto orientativo en base a los datos facilitados. Si el presupuesto es de su agrado concertamos una visita de obra en el que le facilitamos muestrario para elegir y tomamos medidas para ajustar al máximo el presupuesto. Con el presupuesto reajustado y el producto elegido, solo falta concretar la fecha de inicio de obra.